martes, 22 de octubre de 2019

El robo y el Fraude

Era una tarde de primavera en la oficina de Carl Carter, cuando en un momento llaman a la puerta.
-Adelante, está abierto- dice Carl atento
Carter se sorprendería  al ver a esta persona; era su compañero de la academia Loui D´Vitto, este se levantaría de su cómodo asiento para ir a abrazarlo.
-Dime, ¿Qué te trae por aquí?- Diría Carl con entusiasmo.
-Pues… Veras… Escuche que te convertiste en un investigador luego de la graduación, me ha surgido un problema así que quería saber si podrías ayudarme- Diría Loui preocupado mientras se frotaba las manos.
-¡Claro! Toma asiento y cuéntame – Carl prepararía una taza para cada uno para luego tomar asiento- ¿Cuál es el problema?
+Te cuento… Yo manejo una empresa de seguridad y el viernes un empresario nos contrato para que le cuidemos unos papeles importantes, mientras él se encontraba y que para el martes iría a buscarlos. Ayer, sábado, esos papeles fueron robados de su oficina con uno de mis hombres realizando guardia, quisiera pedir tu ayuda para recuperar esos papeles para antes del martes, si no se recuperan mancharan la reputación de nuestra empresa y posiblemente tendremos que cerrarla, ¿Qué dices?
-Luego de pensarlo un momento, Carl le dice- Esta bien, recuperare esos papeles, no te preocupes
+Muchas gracias, ¡En serio! No sabes el favor que me harías si los recuperas.
-Bien, pondré manos en el asunto. ¿Me podrías llevar al lugar del suceso?
+Claro vamos para allí
Carter aceptó este trabajo pero sabía que no sería un caso normal, no cualquiera puede burlar un sistema de seguridad a nivel de empresa, el no sabía en lo que se metía.
Ya en el lugar, Carter empezó a investigar la escena, era una oficina muy bien decorada y estaba todo impecable exceptuando un cuadro roto en el suelo, el cual ocultaba una caja fuerte donde se encontraban los papeles antes de ser robados.
Mientras buscaba algún indicio, encontró una huella con una forma muy parecida a las botas que usan los oficiales y los guardias de seguridad, pero esta seria de arena y no barro como las demás. Carter la observo con duda hasta que alguien le interrumpió…
Era D´Vitto, el cual habría encontrado algo en las cámaras de seguridad y quería que él lo viera. En las grabaciones se observaba a un oficial acercándose y diciéndole unas palabras al guardia de la puerta, para seguidamente este abandonara su puesto.
Esto causo muchas dudas en Carter y una cosa era clara hasta ahora, el culpable se disfrazo de guardia para poder acceder a la oficina y, el ya sabía que la caja fuerte se encontraba detrás del cuadro, por lo cual debe ser alguien que conocía muy bien al empresario.
-¿Quiénes eran los guardias que estaban cuidando el lugar?- Dijo Carl con sutileza.
+En el lugar se encontraban tres de nuestros hombres: Mathew Collins, que se encontraba en la sala de seguridad revisando las cámaras y era el único que podía abrir la puerta sin necesidad de una llave desde aquí. También estaba Michael Johnson, quien estaba dando vueltas por los pasillos. Y por último, estaba Amanda Green, y es la que vemos en las cámaras.
-Bien, quisiera hablar con los tres, los esperare abajo- Dijo Carl con seguridad-
Luego de unos minutos, empecé con el interrogatorio de los posibles sospechosos, el primero, Collins, dijo: “Yo estaba revisando las cámaras cuando vi a una persona en la puerta y lo deje pasar; en ningún momento le escuche la voz o vi su rostro”.
Todo me pareció muy normal por ahora, la persona que lo hizo había planeado esto con antelación y tenía contactos para conseguir trajes y placas de una empresa.
 Pase a interrogar al segundo, Johnson, este dijo: “Mientras caminaba por los pasillos vi una silueta, le apunte con mi arma y le pedí identificación, este sujeto solo saco su placa, donde indicaba que era de la empresa, su nombre era Mike Collins, luego de eso, guardo su placa y solo siguió caminado hacia la oficina, en ningún momento pude escuchar su voz ni ver su rostro, yo era más alto que el asique la gorra ocultaba su cara”. Por ahora seguía con la misma información, solo que le pregunte a Loui y no existe ningún Mike Collins en el sistema, esto no me aclaraba nada.
Pase a realizar el último interrogatorio, el tercer posible sospechoso, Amanda Green, sus palabras fueron: “Yo estaba en la puerta de la oficina cuando en el momento el hombre misterioso se acerco por el pasillo, al principio pensé que era Johnson, pero al acercarse, veo que estaba tapado con un cuellito hasta la nariz y en su placa decía que era el oficial Mike Collins, el me dio un papel donde decía que me fuera a comer algo, que él me remplazaría, por ello supuse que era mudo, asique le hice caso y abandone mi puesto para ir a comer, y cuando vuelvo me encuentro el cuadro en el piso y la caja abierta, tarde unos quince minutos en mi descanso, fue suficiente tiempo para que entrara, sacara los papeles y se fuera por la puerta”. Esta se volvía inquietante, es como si el culpable supiera todo sobre estas personas, horarios, posiciones y hasta reacciones de sus hechos, esto me parecía un robo demasiado “perfecto” así que empecé a sospechar de las confesiones de los guardias. Luego de esto me decidía a seguir revisando el lugar, en los alrededores me percate de que no había arena, lo cual me parecía más raro todavía, y dentro de la oficina el único indicio era esa huella de arena.
Varios minutos después me regrese a mi casa, esta vez fui con Loui, quería hablar con el de nuestras vidas luego de la graduación y también comentar algunas cosas sobre el incidente. Cuando empezamos a tirar nuestras conclusiones, el dijo:
+Yo creo que fue Collins, no creo mucho en su historia, ¿Dejar pasar a un hombre solo porque lleva nuestra placa? ¿Sin pedirle datos o información sobre que quería? Me parece demasiada sospechosa esa actitud.
-Sí, pero no podemos sacar conclusiones precipitadas por el momento, todos tienen motivos para ser culpables e inocentes.
+Prefiero seguir con esto mañana, ¿Te importa si me quedo a dormir aquí?
-Claro, yo me quedaré despierto unos minutos más.
Quise quedarme a investigar, así que salí a realizar una visita. Ya a la mañana siguiente, yo desperté unas dos horas antes que Loui, esto de la investigación me tenía atrapado, pero todo ese tiempo tuvo sus frutos, creí haber encontrado al culpable, así que le dí una nota a Loui que me viera en una ubicación, le dije que había capturado al culpable. La ubicación era un viejo hangar, en la nota le especifique que entrara dentro y se sentara en la silla para que pudiera reconocerlo, este hizo exactamente lo que le pedí.
Luego de esto, una luz se encendió sobre la cabeza de Loui que se encontraba sentado, y otra se encendió encima mío, que también me encontraba sentado en una silla frente a él, solo que yo tenía una mesa delante mío con varios papeles y una luz de mesa apuntando hacia Loui.
Segundos después encendí esta luz la cual medio lo cegaba a Loui.
+ ¿Qué sucede? ¿Carl? ¿Eres tú? ¿Qué está pasando?- Dijo Loui con voz desesperada-
-Soy yo Loui, y como te dije tengo al culpable en este hangar- Diría sonriendo satisfactoriamente-
+Excelente y… ¿Dónde está?-Loui ya se había acostumbrado al cambio de luz y podría ver a Carl
-Está sentado frente de mí.
Hubo un breve silencio en el lugar…
+ ¿Lo dices en serio Carl? Sabes que no me gustan las bromas.
-No es una broma, te estoy diciendo que estas arrestado por robo y hurto dentro de una propiedad privada.
Las luces del hangar se encendieron y con ello se vio en el hangar unas cuantas patrullas y varios oficiales
+Pero no puedes culparme así porque si, dime, ¿Con que pruebas o hechos me acusas a mí de haber cometido semejante acto?
-Esperaba que dijeras eso… Veras, anoche Salí a visitar a alguien, fuí a la casa de mi padre, ya que el compra el periódico todos los días, y en el periódico de hace un par de semanas decía que tu habías detenido un intento de robo de maquinarias en la construcción de un edificio, justo el que está a unas cuadras de las oficina del empresario, y en él decía que tu y el capataz eran muy amigos, tanto como para prestarte su oficina como centro de operación, esa fue mi primera pista, pero era una conclusión muy precipitada.
-Así que el día siguiente me levante temprano para ir a la iglesia, en ella me encontré a la oficial Green, quien iba a confesarse y cuando la vi me di cuenta de una cosa, y quizás, la pista más importante y la que me ayudaría a descubrir al culpable. Te cuento, Johnson dijo que no pudo ver tu cara porque él era más alto que tu, si usaras gorra yo tampoco podría verte la cara, pero Amanda, su estatura es inferior a la tuya, eso quiere decir que ella si pudo verte el rostro. Y con esa información decidí interrogarla nuevamente pero ahora en un lugar más seguro, el cura de la iglesia es un viejo amigo mío así que le pedí que me prestara el confesorio, al cual Amanda fue luego de unos minutos, allí le explique mi duda y hice la pregunta, su respuesta me cautivo, dijo “Si lo vi, en el momento me pareció raro y no lo podía creer y más cuando se llamaba Mike y era mudo, pero su rostro era igual al de Loui”.
-Esa información era más que suficiente para declararte culpable, todo encajaba, las huellas de arena, la ropa, y la información y ubicación de la caja fuerte, y al ser tú el jefe del contrato, el empresario te tendría que haber dejado la contraseña en caso de emergencia extrema. Hablé con el empresario y me dijo que los papeles básicamente eran pruebas de que tu empresa exportaba dinero a una cuenta extranjera en el Caribe.
-Así que… Loui D´Vitto, está arrestado por robo de pruebas y evidencias, y uso de una identidad falsa. Esto te dejara varios años en la cárcel.
Luego de esto la policía arrestó a Loui y yo seguí con mi trabajo, esto solo había sido otro simple caso.
Alumnos: Jesús Ochoa, Agustín Montich, Cristian Vargas

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